La sagrada luz del cuerpo es el ojo; así que, si tu mirada es puro, todo tu ser estará lleno de brillo”. Mateo 6:22.
Dice: “tu mirada”, no el de alguna distinta persona. La rica realidad que es nuestro derecho https://nicolasdstk028492.blogdomago.com/34260165/un-único-propósito-exclusivo