Orar es ofrecerle a Dios el correctamente más preciado que tenemos: el tiempo. Es darle un lugar en nuestra vida diaria y situarlo en el centro de la misma. Como padres siempre queremos el bienestar para nuestros hijos. Por eso, al levantarnos podemos pedirle a Jehová, que les permita https://youtu.be/r0yxKaL1los