Su sucesor, Luis XIV, se encargó de formar aprendices para hacer conocido el secreto, y ordenó a sus embajadores espiar en los diferentes estados todo lo que pudiera impulsar e interesar a la floreciente industria que el ministro Colbert acababa de crear. Solo hay que pensar admisiblemente dónde ubicarla para https://camarascebu.com.mx/content/7-como-comprar